Bart Hess, artista conceptual holandés, refleja en su trabajo una mente que visualiza el cuerpo humano como potencialmente incompleto: una plataforma óptima y personal para mejoras tecnológicas aún por explorar.
Su último trabajo, Epistēmē , una instalación de video que explora las nebulosas fronteras entre lo físico y lo digitalmente mejorado.
La fascinación de Bart Hess por representar el cuerpo a través del velo del avance tecnológico se explora como una colección poética de escenografía en Epistēmē , la palabra griega antigua para conocimiento y comprensión.
El color, el movimiento y la forma se combinan con el paisaje sonoro ambiental en varias secuencias teatrales que exhiben la piel como una interfaz biológica entre el cuerpo y el medio ambiente.
Se manipulan digitalmente trozos de papel, capas de papel de aluminio, juliana de película y piscinas de acuarela, transformando los movimientos e interacciones del mundo real en secuencias de lapso de tiempo surrealistas.
Epistēmē traza un territorio similar explorado por Bart Hess en 2011 con el proyecto del artista holandés Echo , una encuesta análoga del espacio, el cuerpo y el tiempo que anima repetidamente materiales físicos mediante la manipulación digital.
Los segundos divididos de lo físico se estiran, cortan, rebobinan y duplican en una cronología ambigua del tiempo, llevando al espectador a un paisaje de ensueño donde lo digital y lo físico coexisten como fallas imaginativas.
Gregory Han / DesignMilk